-Más que dos carretas o
que soga de barco.-
Género. Narrativa fantástica.
Edición en español (1996) |
Lo que nos cuenta. En el libro Manuscrito
encontrado en Zaragoza (publicación original: Manuscrit trouvè
à Saragosse, 1804 en una de sus versiones "originales"
aunque las hay posteriores), un oficial del ejército francés encuentra unos
cuadernos escritos en español durante el sitio de Zaragoza en las Guerras napoleónicas, redactados en
primera persona por un noble español en camino hacia Madrid desde el sur de España
para servir al mando de las guardias valonas de Felipe V. Al ser capturado por
fuerzas españolas, el capitán al mando de las mismas resulta ser un
descendiente del protagonista, que agradecido por salvar la obra hospeda al
oficial en su casa y se la traduce. Y todo esto no es más que la primera
página. Libro también conocido como El manuscrito hallado en Zaragoza.
Mi opinión. No estoy seguro de la verdadera intención del autor con este libro. Al parecer hay muchas ediciones diferentes de la obra e incluso en fechas recientes se han descubierto documentos que suponen casi una reescritura. Y no estoy seguro porque se puede ver de dos formas muy diferentes.
Narración dedálica que desde la matrioska gótica y la modernidad romántica, al menos para su tiempo, nos presenta una trama acordeónicamente coral de relatos fantásticos (y algo escabrosos) con el protagonista como hilo conductor. Complejamente atractiva.
O también una sátira sobre
la modernidad gótica y sus tópicos, que mediante la estructura de cuentos
unidos por la trama de la novela nos lleva del fantástico irregular al rosa más
claro, pasando por el espíritu del destape más setentero y del susto inocente a
los beatos. Sencillísimo de leer y disfrutar.
La profusa cantidad de
detalles demuestra una gran documentación, por lo que la primera interpretación
podría ser la más cercana a la intención del autor. Pero la segunda es tan
atractiva y nada descabellada que…
Destacado. Los propios personajes
llamando al orden de la narración.
Potenciales evocados. Inevitablemente,
Giovanni Boccaccio y Geoffrey Chaucer, pero desde el gótico (¿paródico?); algo de El monte de
las ánimas que flota en el ambiente; salvando las distancias y
creo que la intención, Cuentos de la Alhambra; un híbrido de la Hammer y
Troma, que no me resisto todavía.