jueves, 16 de mayo de 2013

LOS JARDINES DE LA LUNA. Steven Erikson

-Épica tan generalizada que hasta parece algo común.-

Portada del libro Los jardines de la luna, de Steven Erikson
Edición en español (2009)

Lo que nos cuenta. En el libro Los jardines de la luna (publicación original: Gardens of the Moon, 1999), un niño de la nobleza llamado Ganoes Paran es testigo lejano de unos disturbios en Malaz, la capital del imperio, y manifiesta su deseo de seguir la carrera militar. Siete años después, el niño se ha convertido en teniente y forma parte de las fuerzas de la Emperatriz Laseen, que lleva siete años en el cargo y que ha puesto sus ojos sobre la última ciudad libre fuera de su control, Darujhistan. Pero son varias las facciones que se oponen a la Emperatriz. Libro también conocido como El último puente y primer volumen de los diez que componen la serie Malaz: El libro de los caídos.

Mi opinión. Libro más confuso que difícil, escrito con mucha imaginación pero con naturaleza “rolera”, que abusa de las preguntas sin respuesta más que de los misterios y también de lo intrascendente por el mero hecho de quedar bonito, con personajes a cuál más épico y misterioso pero en general bien planteados y reconocibles a niveles suficientes, de trama entretenida sin la menor duda e interesante de verdad pero narrada de manera farragosa, de mejorable edición, de ritmo intermitente pero rapidísimo por lo general, que trabaja más y mejor las atmósferas y los personajes que los diálogos y las descripciones y, sobre todo, nada más que una carta de presentación de todo lo que el autor quiere compartir con los lectores.

Destacado. Los personajes menos épicos y poderosos están mucho más cuidados que el resto, hablando desde el punto de vista narrativo.

Potenciales evocados. Cóctel espeso del Glen Cook más fantástico, Michael Moorcock más realista, George R. R. Martin peor narrador, Robert E. Howard con más visión, Steven Brust menos humorístico, Garay Gygax más torvo e imaginativo, el Brandon Sanderson de El camino de los reyes con peor estilo y Paul Hoffman con las ideas más claras; la labor de Tracy Hickman y Margaret Weis pero intentando adaptarse a lo que el autor considera los gustos y tendencias más modernas de los aficionados al género.

Linkwithin