-Abrazando la Space Opera, ya sin disimulos.-
Lo que nos cuenta. En el libro Endymion (publicación original: Endymion, 1995) y casi tres siglos después de los acontecimientos narrados en La caída de Hyperion, el gobierno de lo que antes era la Hegemonía es ahora una teocracia católica
absolutista e implacable conocida como Pax. Raul Endymion, encerrado en
una pequeña cápsula que orbita un mundo bajo interdicto, Armaghast, recuerda
cuando era un joven que, tras haber formado parte de tropas auxiliares de Pax
con las que vio acción, terminó como guía de caza en zonas pantanosas de
Hyperion. Un incidente con las personas menos adecuadas hace que termine siendo
condenado a muerte, sentencia que evitara mediante la intervención de alguien
que dice ser Martin Silenius, un personaje de los legendarios poemas prohibidos
conocidos como los Cantos, quien a cambio pide a Raul que localice a una niña
llamada Aena, la hija de Brawne Lamia, otro personaje de los Cantos, la proteja
y la cuide bien lejos de las garras de Pax. Tercer libro del Ciclo de Hyperion
y primero del Ciclo del Ascenso (también conocido como Los viajes de Endymion).
Mi opinión. Novela realmente atrayente y de gran
ritmo en su primer y último tercio, con un acusado (pero mucho, mucho, mucho)
valle en su tercio medio, que decide continuar la saga con unos tonos parecidos
a los del volumen anterior, pero un estilo y una intencionalidad distintas (que
no con formas diferentes), llena de eventos
concatenados casi sin descanso en algunos momentos, con bastante acción en el
sentido más aceptado de la palabra en estas lides, al borde de
abusar del deus ex machina, unos
personajes principales suficientes y adaptados a la tarea sin alardes, con antagonistas en frente bastante interesantes y con motivaciones mucho más
claras en el argumento, dos bandos que van alternando sus turnos en la trama para
crear más expectativas en el lector (sistema muy básico que sigue
funcionando), con sobrepeso obvio, irregular, de trasfondo interesantísimo con
muchos conceptos aprovechables, que como novela independiente funciona bien, pero no se disfruta tanto si no se han leído los anteriores ya que no se
entienden muchas cosas que se dan por hechas pero, a la vez, paga un
precio muy alto ya que es inevitable comparar con Hyperion y La caída de Hyperion, en especial con la primera, que son trabajos de más empaque conceptual
aunque sea discutible que sus desarrollos sean superiores a este que nos
ocupa ahora, que hace necesario leer el siguiente libro, El ascenso de Endymion y que ofrece un producto bastante entretenido (con más sustancia si
se conoce la saga).
Destacado. El padre capitán De Soya, tanto el propio
personaje como su evolución durante la novela.
Potenciales Evocados. Una Space Opera ni mejor ni peor
que otras, pero que se apoya en y se nutre de otros dos libros anteriores y de
todo su trasfondo, jugando por ello con ventaja como novela; momentos Heinlein
y momentos Asimov diluidos aquí y allá, quedan avisados.