-La historia es tan rica
que siempre ofrece escenarios menos trillados a los novelistas -.
Edición en español (2007) |
Género. Novela histórica.
Lo que nos cuenta. El libro La herencia
de Gothia (publicación original: Arvet after Arn, 2001) es una
narración novelada de los acontecimientos que llevaron a consolidar la base de
lo que hoy es Suecia mediante la suma de reinos más regionales, con el
personaje histórico Birger Jarl como hilo conductor.
Mi opinión. Sin entroncarse en la
conocida serie del autor sobre las Cruzadas, sí aprovecha su tirón para, usando
la licencia del supuesto parentesco entre los protagonistas, escribir otro tipo
de libro con más deseos de novelar historia (y leyenda) pero menos de narrar
por narrar, y llevarnos a unos momentos muy importantes en la historia de
Suecia (y en su relación con sus vecinos).
El retrato de la evolución
del personaje está bastante logrado y además nos sirve para conocer el cambio
de las costumbres más “vikingas” por otras más modernas, con la influencia de
la Iglesia Católica como telón de fondo. El camino al poder de Birger no fue
sencillo y sí muy enrevesado (a veces parece que no planeó ni recorrerlo), pero
lo siguió con una voluntad férrea haciendo uso tanto de la violencia y la
fidelidad como del sentido común (pero no todos los recursos a la vez, si no
eligiendo el que mejor le viniese según el caso).
Destacado. Que transcurre en un
lugar y una época poco habituales dentro del género.
Potenciales evocados. Cierto aire a Frans G. Bengtsson,
pero mucho más huraño; puntos en común con el estilo de Crónicas del señor de la guerra pero con menos tendencia a la batalla y más a la intriga
política; momentos Menzoberranzan, por la importancia del matriarcado (menor
pero nunca despreciable) y por la forja de un carácter (con resultados muy
distintos).