-Graciosa e intrascendente, sello de identidad del autor.-
Lo que nos cuenta. En el libro Wilt (publicación original: Wilt, 1976) conocemos a Henry Wilt, un hombre anodino que enseña
Humanidades en una escuela de artes y oficios, pasea al perro, se siente
frustrado, vive con ello y está casado desde hace doce años con Eva en un
matrimonio convencional (léase “ligeramente amargo, pero sin eventos catastróficos
que requieran de abogados”). Cuando Eva hace una nueva amiga, las cosas se
empezarán a torcer para Wilt y su matrimonio hasta extremos inesperados que
lo llevarán a ser sospechoso del homicidio de su mujer. Primer libro de la serie dedicada a las desventuras de Wilt.
Mi opinión. Humor delirante de todos los colores narrado con flema british al servicio de una novela de buen ritmo, situaciones
absurdas (pero posibles) en el seno de actitudes personales creíbles y auténticas
(todos podremos reconocer en algún personaje a gente que hemos tratado en un
momento u otro de nuestras vidas), que alterna lo irónico con lo escatológico y
lo sarcástico con lo chapoteante, fácil y rápida de leer.
Destacado. Leyendo este libro en el metro en épocas
preuniversitarias se me escaparon unas cuantas risas que llamaron la atención
de mis compañeros de vagón. Nunca he querido releerlo por si pierdo esos
recuerdos al enfrentar con otra actitud, pasados los años, las desventuras de
Wilt.
Potenciales Evocados. Igual que
Terry Pratchett tenía estilo propio y entre sus novelas creó una saga, Sharpe hizo lo
mismo de otra manera y a escala; maneras Peter Sellers en situaciones Benny Hill
pequeño-burguesas.