-Haciendo género de una manera muy especial, rebosando
sensibilidad y señalando verdades universales.-
Edición 1990 |
Género. Ciencia ficción (y no narrativa fantástica a pesar de que lo pueda parecer e incluso siga algunos de sus caminos, al menos en mi humilde opinión, aunque sea de un tipo un tanto especial y el hecho se le pueda pasar por alto a algún lector. Pero en realidad ni siquiera importa).
Lo que nos cuenta. En el libro Kalpa imperial (publicación original: 1983), un anónimo narrador comparte con el lector once relatos sobre eventos ocurridos
en algún momento de la historia del Imperio Más Vasto que Nunca Existió,
protagonizados por diferentes personajes más o menos famosos tanto en los
registros imperiales como en la memoria de muchos habitantes del imperio y que
suelen mostrar gran cantidad (y profundos) aspectos de la naturaleza humana, tanto los
buenos como los malos.
Mi opinión. Trabajo muy especial (no conozco nada
parecido escrito/creado en español), que nos habla de cómo es el ser
humano mediante el disfraz de varias historias que sucedieron en un futuro muy
lejano en el que la civilización ha pasado por varias épocas oscuras (no, el
desajuste entre los tiempos no es casual) y en la que el comportamiento de los
hombres, capaces de lo mejor y de lo peor, en el fondo no ha cambiado demasiado
(y el repaso de muchas actitudes personales, pero comunes, es uno de los pilares
de la novela), escrito con una técnica sencilla dificilísima de manejar
con soltura y buenos resultados (y la presente obra lo consigue), de ritmo tan
suave como cálido, con ecos intemporales, lleno de humor fino y realista, con
personajes complejos desde su "simplicidad" entre los que resaltan los femeninos
ofreciendo, en conjunto, un libro destacable que tal vez pueda llegar a alejar
a algunos lectores según avanzan en sus páginas ya que, aunque hipnótico por
momentos, todos los relatos siguen el mismo estilo, diseño y concepto general, entrando de lleno en las variaciones sostenidas por más que sus tramas cambien.
Destacado. Dos cosas. Una, que en su momento, me
enseñó una palabra nueva: kalpa. La otra, que al inglés creo que lo tradujo Ursula K. Le Guin.
Potenciales Evocados. Con otro estilo y destinos (y menos ironía y socarronería, pero presentes también), aires de la saga La tierra moribunda (compartiendo su aproximación a la ciencia ficción desde supuesta narrativa fantástica), mezclados con algo de la intencionalidad de Los tejedores de cabellos e, incluso, de las sensaciones Las mil y una noches con fondo más realista y
e incluso eterno; aunque son supuestos instantes de la historia de un
imperio, todo un muestrario de la naturaleza humana con sensibilidad (que no
estilo) que recuerda a la de Doris Lessing, pero menos militante.