Género. Novela histórica.
Lo que nos cuenta. En el libro El anillo de hierro (publicación original: 2006) conocemos a Tito Vibio, un veterano de guerra
romano que se hace pasar por Aulo Domicio, romano con la ciudadanía
otorgada y de origen ibérico que ahora
vive en sur de la península, aunque algunas personas saben que, hace mucho
tiempo, se llamó Audax y participó en el complot contra Viriato. Tito recuerda
su pasado, que no siempre es como la gente piensa que fue, y cómo terminó en el
asedio final a Cartago.
Mi opinión. Novela que trata de mostrar diferentes
aspectos y eventos del tiempo en el que transcurre mediante el deambular físico
del protagonista (que transmite un acertado desencanto) y sus cambios de
situación personal y social, que son bastantes ambos, pero que por lo tanto no
ofrece un tema definido en su trama, de cierto sobrepeso, en la que se nota que
el autor conoce y disfruta de la Antigua Roma, ambiciosa en planteamientos,
correcta en general en resultados, más intermitente que irregular,
que toma riesgos en la elección de ciertos términos, que sugiere líneas argumentales
que luego no terminan de desarrollarse (tal vez tenga secuelas, pero lo
desconozco), con tendencia al tono único y entretenida a grandes rasgos.
Destacado. Momentos “clásicos”, entre el homenaje y
otra cosa.
Potenciales
evocados. Más empaque
histórico que Simon Scarrow, mucho más, pero cierta intencionalidad similar por
momentos, y algún tic en común con el primer volumen de Santiago Posteguillo en la trilogía Escipión el Africano (por más que esté en otro escenario, otro tiempo y, quizás, en otra liga).