Lo que nos cuenta. En el libro Elric de Melniboné (publicación original: Elric of Melnibone, 1972) conocemos a Elric, el emperador de Melniboné, la ciudad que
dominó el mundo conocido durante miles de años y que ahora ha perdido su
predominio indiscutible bajo la presión de los nuevos Reinos Jóvenes. Elric es
albino, brujo y guerrero, melancólico, enamorado de su prima Cymoril y parece
prestar poca atención a los movimientos de su primo Yyrkoon para sacarlo del
Trono de Rubí. Primer libro de la saga Crónicas de Elric, el emperador albino.
Mi opinión. Trabajo por el que el tiempo ha pasado con
algo de erosión porque lo que era distinto hace años ahora no lo es, ya que
ofrece un protagonista antihéroe, ni bueno ni malo, que toma muchas posturas
equivocadas, que sufre a causa de sus dudas y malas decisiones, que se enfrenta
a intrigas en la corte y cosas por el estilo, lo cual sirvió en el pasado para
innovar en cierto modo y ahora ofrece un producto conocido, narrado con
más cuidado y sensibilidad que la mayoría de la producción de Michael Moorcock, agradable
de leer sin alardes, de ritmo notable, de trama entretenida, pero novela sin
sorpresas (al contrario, en realidad), ni entonces ni ahora.
Destacado. La personalidad del protagonista, poco
común en el género hace más de cuarenta años, conocida ahora, pero que ha
envejecido mal por los detalles casi inocentes de su comportamiento.
Potenciales Evocados. Elric fue el
precursor de esos protagonistas de fantasía poderosos, pero inseguros en cierta
manera, atormentados y con mucha vida interior, que sin embargo ahora son tan comunes; lo
que marcó los rumbos de muchos escritores de fantasía que ahora están en su apogeo;
la versión “poética” y "melancólica" de Corum.