-Lo de siempre en el postapocalipsis pero con un
protagonista algo distinto y unos “zombis” diferentes.-
Género. Novela corta.
Lo que nos cuenta. En el libro Left Alive (publicación original: 2014), los intentos de un investigador por luchar contra la deforestación mediante un
acelerador del crecimiento vegetal terminan, al parecer de forma accidental,
de forma distinta a lo previsto ya que, tras la ingestión de plantas
tratadas con el fertilizante, las deposiciones arrasaban con todos aquellos
nutrientes del suelo que la vida vegetal necesita para crecer, convirtiendo el
mundo en un erial y terminando con gobiernos y normas sociales. Charlen Duwain
es un superviviente que se ha aislado en la zona del lago Hurón. Pero el
recuerdo de sus hijas, lejos de allí en Florida, lo obliga a dejar dicho lugar
seguro para averiguar si ellas están bien sin hacer caso a los rumores sobre
zombis. Primer volumen de la serie Left Alive.
Mi opinión. Trabajo de ritmo perezoso y tendencias “realistas”
(incluyendo a los “zombis”) en caso de que se diese un evento de consecuencias
como las narradas, con querencia a la introspección monologista y al
sufrimiento del protagonista en varios niveles (un protagonista razonable y normal, por cierto), poco esperanzador en general, con formas simples que dan una pequeña idea de lo mucho que intentaba el autor diferenciarse de
productos posapocalípticos similares (sin conseguirlo, pero al menos se nota que lo intentó).
Destacado. El perfil y la actitud del protagonista, lejos de lo habitual.
Potenciales Evocados. Más cerca de 28 días después (por varias razones) o de The day (por los ambientes y la localización) que
de los trabajos de Romero.