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| Edición en español (1988) |
-Perfilando y depurando su estilo propio en el género.-
Género. Novela.
Lo que nos cuenta. En el libro Strega (publicación original: Strega, 1987), Burke sigue residiendo en Nueva York, todavía trabaja como detective privado muy especial y selectivo, además de continuar interpretando la ley a su manera, pero respetando la justicia, al menos tal y como él la entiende. Tras resolver un asunto relacionado con la familia de un miembro de la mafia al que conoce, y después de varios recuerdos del pasado y alguna otra acción, Burke se ve envuelto de nuevo con la familiar del mafioso, contra su voluntad, para encontrar una desagradable fotografía. Segundo libro de la serie Burke, que puede leerse de forma independiente.
Mi opinión. Desarrollo del personaje franquicia de Vachss y del tono propio de esta serie noir, más logrado que el primer volumen, cuya trama de fondo (salpicada de muchas pequeñas tramas) toca un aspecto de la realidad criminal desagradable en especial y de la que conoce mucho el autor por razones profesionales, que consigue controlar las formas sin entrar en la exageración de algunos personajes pero que todavía son bastante extremos en muchos sentidos, de ritmo muy alto, con más datos sobre el protagonista y su vida, de estilo crudo, directo, áspero y rudo para ofrecer una novela entretenida e incómoda en varios sentidos.
Destacado. Diálogos cortantes, punzantes e inciso-contusos.
Potenciales evocados. Esta vez menos Lee Child en las prerrogativas; Don Winslow más “pistolero”, tocando temas escabrosos y posicionándose con claridad; algún aire a El Mex; un Parker igual de duro y más sensible con un Equipo A inquietante a sus espaldas.