-Otra forma de hacer género, pero lejana a los cánones
entonces y ahora.-
Género. Ciencia ficción.
Lo que nos cuenta.
En el libro Bestias (publicación original: Beasts, 1976) y en un futuro indeterminado en el que los Estados Unidos de América están
disgregados en diez grandes zonas independientes y otras más pequeñas, que son
casi ciudades-estado tras una guerra civil, son frecuentes los incidentes armados entre las diferentes comunidades y contra el gobierno
federal venido a menos por la intervención cada vez más influyente del Sistema
de Ingeniería Social que, en realidad, pretende lo contrario, por lo que flota el fantasma de una nueva guerra civil. El doctor Lauren
Casabon debe abandonar su trabajo, por influencias del SIS, en su tarea de
recuperación de halcones en su hábitat natural, pero verá como le ofrecen otro. Caddie es una empleada cuyo contrato es traspasado a Painter, un taciturno leo
(hiíbrido de hombre y león fruto de las antiguas experimentaciones genéticas al
respecto) quien parece ser perseguido por algún tipo de fuerzas gubernamentales. Reynard es un híbrido de hombre y zorro que se mueve como pez en el agua en las
intrigas políticas y tiene una extraña relación con Painter.
Mi opinión. Novela bastante breve que combina una
más que notable ejecución técnica con una más que embrollada exposición de intenciones y planteamientos, junto con una trama algo dispersa de la que el autor pareciera querer prescindir en una primera aproximación para, en
su lugar, trabajar sobre los personajes y las sensaciones que tanto ellos como
las experiencias que viven puedan generar en el lector, escrita con un tono
bastante propio, que decide no ser demasiado explícita respecto al trasfondo
que se intuye riquísimo en detalles, con mucha tensión contenida y poca
acción desde el término más aceptado del término, de belleza
extraña, poder de atracción relativo y curiosa en sí misma en general.
Destacado. El capítulo desde el punto de vista de un
perro salvaje llamado Sweets.
Potenciales Evocados. Podría ser La isla del Dr. Moreau escrita por el Philip K. Dick menos lisérgico en ambientes que podrían
recordar, a veces, a los de El cartero de David Brin, pero todo desde perspectivas
post New Wave sociopolíticas y
distópicas.