-Quizá relativamente avanzado para su tiempo, quizá muy atrasado en la actualidad.-
Edición en español (2017) |
Lo que nos cuenta. El libro Entrebrumas (publicación original: Lud-in-the-Mist, 1926) nos lleva hasta el Estado libre de Dorimare, un país pequeño cuya capital, Entrebrumas, es una localidad muy próspera debido al comercio. Su montañosa frontera occidental limita con el Reino de las Hadas, un territorio del que no se habla, igual que no se habla de sus habitantes quienes, muchos años atrás, sí habían interaccionado frecuentemente con los humanos. Cuando el alcalde de Entrebrumas y sumo senescal de Dorimare, el señor Nathaniel Chanticleer, debe hacer frente a la supuesta llegada ilegal de fruto de las hadas a la ciudad, su propio hijo comienza a comportarse de manera anormal.
Mi opinión. Novela con un estilo bastante bello al comienzo y al final, que en medio no cambia y, sin embargo, sí cambia su impacto en el lector (o, al menos, eso le pasó a este lector), de ritmo lento, muy hijo de su tiempo en las dinámicas mostradas entre personajes, con trama que evoluciona a cosas que parecen pertenecer a subgéneros distintos a la fantasía, que quizá podría verse como una aproximación indirecta (no creo que simbólica) a varias inquietudes sociopolíticas de la época en la que la escribió la autora, nada rápida de leer y particular, muy particular.
Destacado. Lo difícil, dificilísimo diría yo, que resulta crear vínculos empáticos con los personajes.
Potenciales Evocados. Algo Neverwhere, algo de Jonathan Strange y el señor Norrell, algo de Stardust, pero todo con otros tonos y estilos que denotan su época (y, seguramente también, lo mucho que influyó en la escritura de las citadas obras).