-El estilo sigue siendo propio, pero la trama ya no.-
Lo que nos cuenta.
En el libro Bautismo de fuego (publicación original: Chrzest ognia, 1996) y en Brokilón, la driada Milva recuerda durante una cacería cuando conoció al
brujo Geralt, herido, y se le ordenó tratarlo bien en contra de su voluntad e
incluso colaborar con él. El imperio de
Nilfgaard continua su política expansiva y sus agentes están muy
activos, infiltrados en muchos lugares importantes para sus rivales. Quinto
libro de la saga Geralt de Rivia.
Mi opinión. Novela que sigue los pasos de lo propuesto
en los dos tomos anteriores de la saga y que sigue alejándose de los dos
primeros porque, aunque compartan estilos y atmósferas, no hacen lo mismo con
objetivos y alcances, que sigue engordando la trama general mediante eventos y
nuevos personajes (alguno en concreto, llamativo), de ritmo todavía más pausado
si cabe que en las partes previas, calcado al pie de la letra en lo técnico a lo
que la serie ha venido proponiendo, con mucho de enganche entre volúmenes en mi
humilde opinión (con todo lo que ello implica) y que sigue ofreciendo un
ejemplo de cómo hacer fantasía de una forma (en apariencia, nada más) diferente.
Destacado. Más cancha a lo bélico y militar, desde
diferentes ópticas, a diferencia de otros volúmenes, pero sin embargo hay menos
“acción” propiamente dicha.
Potenciales Evocados. Cada vez más clara la mezcla de
los hermanos Strugatski de Qué difícil es ser dios y del Patrick Rothfuss intimista.