-Punto de inflexión en la carrera del autor, en varios
sentidos.-
Lo que nos cuenta. En el libro It (publicación original; It, 1986) y en la localidad de Derry, en la costa este de los
Estados Unidos de América, y a finales de los años cincuenta, un grupito de
muchachos forjó amistad y se enfrentó a una amenaza sobrenatural que, cada
veintiocho años aproximadamente, se manifiesta en Derry para traer muerte y
dolor. A mediados de los años ochenta, esos muchachos son adultos y han
olvidado mucho de lo que sucedió, pero algo les empuja a volver a su ciudad
natal.
Mi opinión. Mastodonte que se lee con relativa
rapidez, con asustaniños que preocupan
más a los adultos al ser conscientes de muchas cosas más que los infantes, con horror
fantástico que se imbrica con las formas y culturas de una nación, con personajes
que durante un tiempo marcaron arquetipos para otros autores que trataban de
narrar cosas y circunstancias parecidas, con un villano que son muchos y que
marcó a una generación (y que parece que de nuevo vuelve a asomar en la
cultura popular), con juegos temporales en la narrativa que ayudan a darle
fuerza a la trama, compacta y poderosa, con un final que bien podría no estar a
la altura de todo lo anterior y un libro que explica bastante de la figura de
King en la literatura de consumo, en el horror fantástico y, quizá, hasta
de cierta progresión del género en los años siguientes a su publicación.
Destacado. Que señaló un momento en la producción de
King en la que los finales ya no eran discutibles sino que, como mínimo,
empezaban a cojear o, al menos, flojeaban respecto al resto de lo que ofrecían
sus libros. Pero también otra cosa que debo añadir: no me pareció lo mismo
cuando lo leí recién publicado que cuando lo releí hace unos añitos.
Potenciales Evocados.
De manera inevitable, por el concepto del mal recurrente y por varias cosas más, El dragón flotante de Peter Straub pero llevado a ambientes de Los cinco aunque
mucho más realistas en cuanto al despertar de unos muchachos al mundo real;
Ronald McDonald, que también es inevitable, con algo de Ungoliant; tendencias socio-costumbristas,
como las que rellenan Cujo hasta los topes, pero aquí con bastante sentido en
la trama.