Género. Relatos.
Lo que nos cuenta.
El libro Sueños de la Gorgona: Ritos de sangre (publicación original: 2018) es
una antología de relatos del género fantástico y abiertos a muchos de sus distintos
subgéneros, todos inspirados por el concepto de los ritos de sangre, seleccionados por el escritor Fermín Moreno, que también participa con un
relato, y por Juan Ángel Laguna Edroso, escritor, responsable de Saco de Huesos
Ediciones y del prólogo de la obra, que nos permitirán conocer a varios tipos de
guerreros en realidades muy distintas y en situaciones muy diferentes, la
búsqueda de una tribu legendaria, las intrigas sobrenaturales que tienen lugar
en un territorio fronterizo, a una madre que lucha por salvar a su hija de las
garras del padre, una cultura antropófaga y las razones por los que unos
famosos habitantes del subsuelo terminaron viviendo allí. Primer número de la
serie Sueños de la Gorgona.
Mi opinión/Destacado/Potenciales
Evocados.
- La viajera
(José Luis Alonso): el encuentro en el desierto de una mujer casi moribunda por
parte de una caravana permite que Ehyjvanna, la Viajera, sobreviva y cuente su
pasado en Kaihhuj, ciudad que ahora ve cómo los muertos caminan por sus calles
tras unos eventos relacionados con Ehyjvanna. Aventuras de espada y brujería en
ambientes “arábigos”, lleno de detalles sobre el mundo y la ambientación pero
sin novedades en ese apartado, de ritmo suficiente, momentos que apuntan a
otros subgéneros y una notable sensación Pulp.
- Cordero de Dios
(Salomé Guadalupe Ingelmo): cruce entre una nueva mirada y nuevas derivas sobre
ciertos pasajes del Antiguo Testamento y una línea de trama de un clásico de la
ciencia ficción del que hemos hablado en este blog hace poco más de un mes, con
la elegancia de mostrar y no citar, un relato más de “ambiente” o “viaje” que
de “acción” o “destino”.
- Mundo perdido
(Diego Salcedo): la búsqueda de la tribu perdida de los Taironas, real según
todos sus restos arqueológicos pero legendaria por lo poco que en realidad se sabe
sobre ellos, atrae a unos científicos con resultados inesperados. Con base en circunstancias
reales en el gran marco, ejercicio de ficción con ecos de Rider Haggard pero “realistas”,
incluso “muy realistas” en algunas de sus derivas de trama.
- Cinco huesos
(Miguel Huertas): la Casa Ealdhert está en peligro, tanto sus tierras como su
fortaleza, incluso su señor, y las acciones de su taumaturgo son ambiguas al
respecto. Fantasía medieval con tendencias Pulp y, quizá, solo una pequeña
parte de algo mayor.
- La memoria de
los muertos (Pablo Loperena): el viaje de un héroe por un territorio entre lo
imposible, lo onírico, lo infernal y lo más “orgánico”, lleva al protagonista hacia
un objetivo que anhela desde mucho tiempo atrás. Aires, por momentos, de los
muchos trasfondos y dinámicas del mundo de Máscaras de matar pero llevados a un
ambiente todavía más “primitivo” o “tribal”, pero también con sensaciones de un
Barker metido en la fantasía, en un relato poderoso que se acerca a la épica
oscura por momentos.
- Ceremonia de
madurez en el apogeo del sexto sol (Lisardo Suárez): un joven aspirante lucha a
muerte contra sus compañeros para convertirse en guerrero. Ritos de madurez
mexicas y ciencia ficción que se combinan en una trama a lo Battle Royale
sustentada en una mezcla de creencias sobrenaturales y tecnología futurista.
- Las Tierras
Malditas (Andrés Díaz Sánchez): Ederlán se interna en la zona que da título al
relato en busca de una niña que creyó ver durante una borrachera y cuya voz
resuena en su cabeza. Pulp con algo de intención y cierto cuidado para no
parecer “lo mismo de siempre”, con aires al Abercrombie de ciertos pasajes de
Tierras rojas.
- El santuru caníbal
(Fermín Moreno): Mbanu aprende de Mbole, su padre, las técnicas y la filosofía que
deben regir las vidas de cazadores como ellos; pero cuando se convierten en
presa, también habrá caminos de aprendizaje. Exotismo en la localización y en
la clase de personajes, no muy habituales en estas lides, en una trama de fantasía
con atractivo extraño.