martes, 21 de enero de 2020

LUNA. James Herbert


-Otra muestra de “lo ochentero” en el subgénero.-

Portada del libro Luna, de James Herbert
Edición en español (1992)

Lo que nos cuenta. El libro Luna (publicación original: Moon, 1985) nos presenta a Jon Childes, ingeniero y profesor de informática en una pequeña escuela de una isla del Canal de la Mancha. Jon está divorciado, tiene una hija que vive con su exesposa y desde joven tuvo visiones sobre su madre muerta, pero terminaron por desaparecer. Ya casado, tuvo visiones sobre crímenes y terminó ayudando a la policía, lo que le costó el matrimonio por cómo se vio afectado, aunque fueron incapaces de capturar al asesino con vida. Tres años después, Jon empieza a tener nuevas visiones sobre crímenes.

Mi opinión. Novela que es todo un ejemplo de cómo se entendía el horror sobrenatural de gran consumo en los años ochenta, lleno de circunstancias gore (para la época, claro, porque ahora se ven más “normales” en estas lides) y situaciones/descripciones “picantonas” (alguna hasta incómoda al borde de lo ilegal con ojos actuales) con independencia de que fueran o no pertinentes, que tarda bastante en arrancar por su deseo de articular la situación personal del protagonista en cuanto a lo social, lo económico, lo sentimental y lo laboral (cosa que logra, por discutible que sea la importancia real de semejante logro para la trama) pero que, cuando lo logra, mantiene bien el ritmo y el interés (aunque, diría yo, un poquito tarde), notable en la atmósfera incómoda que consigue (ya sea en situaciones aparentemente normales como en las que no), poco común (de nuevo, para la época) en cuanto a la naturaleza y manejo de la fuerza (…) antagonista.

Destacado. El encaje de bolillos que tuvo que hacer el traductor para no estropear una de las sorpresas de la trama…

Potenciales Evocados. Un Herbert que, en esta obra, parece un cruce de Koontz y Laymon.

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