-Menos acción, más Historia, algo menos de ficción.-
Lo que nos cuenta. En el libro Atila. Los hunos a las puertas de Roma (publicación original: Attila. The Gathering of the Storm, 2007) y bastantes años después del volumen
anterior, Atila ya no es ningún niño sino un hombre fuerte, astuto e
inmisericorde que se dedica al ajuste de cuentas con sus propias manos y usurpa
el trono de los hunos, al que tiene relativo derecho, al frente de cuyos
guerreros piensa llegar hasta el último confín de occidente, bajo control
romano de complaciente displicencia ante posibles amenazas. Segundo volumen de
la trilogía Atila.
Mi opinión. Continuación de la vida novelada de Atila,
que tiene que seguir inventando y suponiendo muchas cosas, en esta ocasión dentro
de unos márgenes amplios de historiografía aceptada por lo general y con menos
chirridos, centrada en el personaje con cancha para que conozcamos qué pasa
en Roma y cómo los sucesos allí entroncarán con las ambiciones del famoso huno,
de ritmo brioso a pesar de la abundancia de los momentos más anecdóticos que
novelescos, entretenida, más completo como libro que el anterior, pero con menos
que contar en sus páginas por todo lo que el autor desea reservar para el último volumen de la trilogía y agradable de leer.
Destacado. Un protagonista más creíble en general.
Potenciales
evocados. Tonos y
desarrollos diferentes a los de los trabajos de José Luis Corral
y Albert Salvadó,
tan imaginativo como el trabajo de William Dietrich, pero consiguiendo no parecer tan fantasioso; si cambiamos Atila por Genghis
Khan, cercano (que no similar) al concepto y propuesta de la saga de ConnIggulden, aunque más “oscuro”.