-Un verdadero Young Adult, sin serlo, pero que dicho público objetivo, en general, no sabrá ni podrá disfrutar como merece.-
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| Edición en español (2012) |
Lo que nos cuenta. En el libro El bosque mágico (publicación original: The Magician King, 2011) Quentin, Julia, Janet y Elliot gobiernan Fillory desde hace un tiempo durante el que no han vuelto al mundo real que los vio nacer. Quentin sigue sintiendo, a pesar de sus grandes logros, que todavía falta algo, que no ha alcanzado un objetivo que en realidad desconoce, y una de las formas de entretenerse y acabar con esa sensación es perseguir junto a sus amigos a la Liebre Vidente, una de las doce Bestias Únicas de Fillory, cuyo poder según las leyendas es predecir el futuro de todo aquel que consiga atraparla. Segundo libro de la serie Los magos.
Mi opinión. Trabajo que se va alejando del carácter iniciático de la primera parte, que diluye los homenajes, pero continúa ajustando cuentas aunque desde aproximaciones más indirectas, que abandona la “Fantasía contracultural” pero se acerca más al “Protoexistencialismo fantástico”, aunque de forma disimulada, con un planteamiento narrativo convencional en el género, pero que sigue trabajándolo con ese estilo tan especial que hace que, por momentos, se sienta que el ambiente fantástico es poco más que una anécdota e incluso un simbolismo de muchas otras cosas casi vitales, escrito con cuidado y cariño, teñido de saudade, de ritmo estable no muy alto, con unos personajes que han evolucionado (aunque no todos) de forma interesante hacia aspectos mucho más creíbles desde Los magos, un libro que tiene mejor materia prima que este pero que, sin embargo, está peor cocinado y, en resumen, una novela con estilo propio dentro del género, pero que no está hecha para el paladar de todos los aficionados al mismo porque, entre otras razones, maneja la fantasía mirando hacia el interior de muchas vidas.
Destacado. El camino de Julia hacia la magia en contraposición al de los otros amigos.
Potenciales evocados. Menos ofrendas insumisas a conocidos trabajos en su género que la primera parte, pero todavía encontramos cosas que nos sugieren El león, la bruja y el armario, pero internamente reflexiva, El tapiz de Fionavar, pero con personajes con un poco más de frente, momentos de Las naves de la magia, pero más prácticos, aires de Harry Potter, pero desde el exterior, introduciendo el recuerdo a varias fábulas, además de varios puntitos más que tal vez el lector pueda identificar.