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jueves, 20 de febrero de 2020

EL ÚLTIMO ESCALÓN. Richard Matheson


-Una de las etapas que marca la evolución entre el subgénero “de antes” y el contemporáneo.-

Portada del libro El último escalón, de Richard Matheson
Edición en español (2004)



Lo que nos cuenta. El libro El último escalón (publicación original: A Stir of Echoes, 1958) nos presenta a Tom Wallece, un hombre casado que, tras ser hipnotizado durante una reunión, comienza a experimentar fenómenos extraños que parecen transmitirle los pensamientos de otros. Según avanza la situación, Tom descubre que quizá solo esté recibiendo la llamada mental de una persona muerta.


Mi opinión. Novela que, además de ser un trabajo que hoy se lee con cierta condescendencia en cuanto a su trama, con fluidez narrativa y con poco más que cierto interés, resulta ser importante en la arqueología literaria (al menos en opinión de este lector) porque supuso el comienzo de una etapa en el subgénero.


Y lo digo porque ofrece cosas poco comunes en su tiempo, que pronto se hicieron menos raras y en nuestra época son habituales, como el uso de lo sobrenatural como excusa para contar otra historia que no está centrada en lo fantástico, el manejo de la sexualidad de una forma muy sólida que no se deja llevar ni por mojigaterías ni por exageraciones, la sordidez de nuestro entorno que se mantiene al acecho bajo sonrisas resplandecientes o pasteles de manzana y la amenaza que funciona más por sus consecuencias que por ella misma.


Destacado. El tiempo puede haber dañado a los efectismos de género de esta obra, tal vez, pero no a su narrativa ni a su intención.


Potenciales Evocados. Stephen King siempre ha declarado su amor por Matheson y este libro puede ser una clave en esa emoción: es común ver en la producción de King una cara en los personajes de cara a su sociedad y otra en lo privado, hecho que construye buena parte de los cimientos de este libro.