-Una idea interesante para su época, no tanto ahora, y una ejecución irregular, tanto entonces como ahora.-
Edición en español (2012) |
Lo que nos cuenta. El libro La fuga de Logan (publicación original: Logan’s Run, 1967) nos presenta al Vigilante Logan, un agente de Sueño Profundo dedicado a la caza de Fugitivos, personas que no siguen la ley y, al cumplir los veintiún años, tratan de evitar su final en las Casas del Sueño. Hay más Fugitivos cada vez y parecen estar organizados, buscando un lugar llamado Santuario donde podrán evitar su destino dictado por el sistema sociopolítico en el que viven. Cuando llega su último día, Logan tiene dudas y un contacto casi fortuito con Jessica, la hermana de una de sus víctimas, hace que él mismo se convierta en un Fugitivo.
Mi opinión. Novela que se lee en un suspiro por su propio ritmo, porque no se toma demasiado interés en profundizar en las motivaciones de los personajes (sobre todo, en las razones de la/s evolución/es del protagonista), porque lanza pinceladas de la sociedad que funcionan sin que se expliquen o desarrollen y porque la trama parece una evolución de escenas teatrales pintorescas (o, como leí una vez y coincido, de niveles de videojuego), muy irregular en su estilo que bambolea desde lo relativamente elaborado hasta lo mínimamente funcional (quizá fruto de haber sido escrita por dos autores), discutible en muchas cosas y entretenida desde la curiosidad.
Destacado. El “espíritu” de la Era de Acuario, ofrecido mediante Pulp New Wave, que lo empaña todo.
Potenciales Evocados. Uno de esos ejemplos, escasos por lo general, de que a veces la versión audiovisual mejora (hasta donde puede, claro) el producto literario original; ideas combinadas de Harlan Ellison y Brian W. Aldiss, pero escritas por Marcial Lafuente Estefanía si se hubiera especializado en ciencia ficción serie B.