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domingo, 22 de diciembre de 2019

ZOTHIQUE, EL ÚLTIMO CONTINENTE. Clark Ashton Smith


-El impacto del paso del tiempo es menor cuando las formas anticuadas coinciden y enlazan de forma íntima con el espíritu de la narración y sus contenidos.-

Portada del libro Zothique, el último continente, de Clark Ashton Smith
Edición en español (2011)

Género. Relatos.


Lo que nos cuenta. El libro Zothique, el último continente (publicación original: Zothique, 1970) es una recopilación de relatos más un poema, publicados de forma independiente entre 1932 y 1938, que transcurren en el fantástico y futuro continente conocido como Zothique.


Mi opinión. Recopilación de relatos de fantasía que no se queda solo en eso porque tiene su lugar en la historia del género, y lo tiene debido a cómo maneja la mayoría de sus tópicos, tropos y arquetipos (porque casi todos están entre sus páginas) para alejarlos del típico Pulp, de la típica Espada y brujería o de la típica Fantasía medieval por muchas razones y de varias maneras distintas.


Y es que, para empezar, Zothique no es un lugar perteneciente a un pasado perdido en nieblas de leyenda sino uno del futuro lejano de la humanidad. Además, y por momentos, parece “pervertir” las temáticas de fondo de un buen número de cuentos de toda la vida mediante tramas bastante oscuras, casi negativas en muchas ocasiones y carentes de esperanza la mayoría de las veces, ofrece unos personajes “indefensos” frente a las decisiones del autor para tratar los asuntos que desea, un halo poético logrado que parece reflejar la naturaleza de la propia Zothique, cierta “carnalidad” (interpretada de varias maneras) muy recurrente, una ausencia frecuente de “héroes” y una decadencia que empapa todo el texto, uno interesante, distintivo y con un lugar propio en su género (tanto desde lo taxonómico como desde lo literario).


Destacado. Lo bien que enlaza el contenido, el estilo, la atmósfera y la trama (lo que relativiza la posible sensación de prosa anticuada a ojos contemporáneos).


Potenciales Evocados. Lo que tal vez pudo inspirar la Saga de la Tierra Moribunda (aunque tomase luego sus propias derivas); quizá este fuera un posible resultado si a Lovecraft le hubieran pedido que escribiera historias en la época de la Atlantis de Kull y si hubiera sido menos “mojigato”.