-Otro producto de su época, lugar y circunstancias.-
Lo que nos cuenta.
En el libro La carretera de Volokolamsk (publicación original: Волоколамское шоссе, 1944) el autor busca, dos años después de los acontecimientos que desea conocer más
en profundidad, testimonios sobre la Octava División de Guardias del general
Panfílov, quienes protagonizaron la defensa del acceso a Moscú cerca de la carretera
de Volokolamsk frente al ataque alemán durante la Segunda guerra mundial. La novela nos presenta el testimonio de uno de los protagonistas, el oficial
kazajo Baurdzhán Momish-Ulí.
Mi opinión. Trabajo de formas bastante agradables
desde el punto de vista técnico y con mucho ritmo narrativo, pero contenidos
pasados por el tamiz político, que seguro influyó en el autor, en los que
soldados soviéticos comprenden toda penuria en nombre de la sagrada patria, se
sacrifican de manera voluntaria en todos los casos y sus oficiales son sus amables
tutores que los acompañan de la mano todo el camino, los soldados alemanes poco
más que bestias salvajes, etc, etc, etc… En resumen, una curiosidad de interés
literario relativo, pero muy ilustrativa desde lo político cuando se escribió.
Destacado. Su grado de subjetividad, calificable de
intenso como mínimo.
Potenciales Evocados. Como Cherniakovski: el general T-34, digno fruto de su tiempo; se parece a La cruz de hierro (de la que no
tardaremos en hablar aquí) como un huevo a una castaña.