-Ideas interesantes y desarrollos que no están totalmente
a la altura.-
Lo que nos cuenta. En el libro Pensad en Flebas (publicación original: Consider Phlebas, 1987), una nave militar avanzada de La
Cultura es destruida en combate, pero la Mente artificial que la dirige consigue
llegar a un planeta dentro de una zona de exclusión. Bora Horza Gobuchul es un
cambiante que trabaja como agente encubierto para los idiranos, civilización
guerrera enfrentada con La Cultura, al que se le encarga la localización y
captura de dicha Mente tanto por sus habilidades como porque Horza ha estado
con anterioridad en el planeta donde está su objetivo. Primer libro de la serie La Cultura.
Mi opinión. Novela que, aunque es una Space Opera (con todo lo bueno y lo malo que eso implica), tiene más interés de lo habitual
en la generación de un trasfondo rico y amplio mientras, sospecho, trata de proponer
reflexiones al lector, de tendencias muy “aventureras”, plagada de acción (pero
mucha, mucha, mucha), que introduce escenas y situaciones que, más allá de su
potencia individual, son de dudosa pertinencia en la globalidad de la trama y
además pueden ir hasta en contra de la fluidez natural de la obra, que a
veces se recrea en detalles de importancia menor, que intenta dotar al
protagonista y a varios secundarios de mayor entidad narrativa, pero lo hace de
forma extraña, con claro sobrepeso, alargada tratando de dar más envergadura a
una trama simple en el fondo a la que paralelamente intenta fortalecerse con el
trasfondo y los personajes, con momentos que parecen tics de la Edad de Oro y
entretenida en general.
Destacado. La relación entre Bora Horza Gobuchul y
Juboal-Rabaroansa Perosteck Alseyn Balveda dam T´seif, su némesis en el otro
bando e imagen especular alterada.
Potenciales Evocados. Por aquello de la futilidad de muchas cosas que pueden
parecer importantes para personas e incluso para colectivos, Los Héroes; a
veces, Mara Jade más reflexiva y menos operativa, junto a un cruce de Otto
McGavin y Mística con un carácter próximo a un Cat Shannon algo
melancólico.