Género. Ciencia ficción.
Lo que nos cuenta. En el libro Osada (publicación original: Corageous, 2007), la flota en fuga de la Alianza
llega al sistema Baldur, considerado como de “segunda clase” y antiguo destino
turístico habitual mucho antes de la guerra. Los síndicos apenas tienen naves de combate en el sector porque no esperaban que la flota al mando de John
Black Jack Geary hiciese un salto a
esta zona. Al descubrir que los sistemas logísticos no han
calculado de manera correcta las futuras necesidades de materiales y suministros, debido a que
el estilo de Geary es tan exitoso como imprevisible, la flota tratará de usar
los recursos síndicos del sistema, pero tendrán que simular que no quieren
efectuar saqueos y sí ataques para evitar que sus dueños destruyan instalaciones
y materias primas antes de ser capturadas. Tercer libro de la serie La flota perdida.
Mi opinión. Continuación de esta serie de novelas de
ciencia ficción militar que ofrecen combates espaciales, guerra interestelar, amenazas
ocultas, conflictos personales y profesionales, intriga e intereses usando
estructuras iterativas, formas sencillas (pero resultonas a su manera), de buen
ritmo, alta previsibilidad, al borde de la monotonía en ocasiones, con personajes
sin vida propia y sí con acartonadas labores de sostenimiento de la trama
(incluyendo al protagonista) para ofrecer una propuesta ligera y entretenida.
Destacado. Que comienzan las primeras sensaciones de déjà
vu.
Potenciales
evocados. Extraño cruce
entre una Anábasis intergaláctica, tendencias como las de Patrick O´Brian pero en una
flota espacial dirigida por personalidades que son carne de diván y algo de Right Ascension en cuanto a lo de un enemigo directo en frente, pero otro oculto
en algún lugar.