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viernes, 17 de enero de 2014

FESTÍN DE CUERVOS. George R. R. Martin

-Las sensaciones del volumen anterior son ahora algo más que sensaciones.- 
Portada del libro Festín de cuervos, de George R. R. Martin
Edición en español (2011)

Género. Narrativa Fantástica.

Lo que nos cuenta. Difícil indicarlo sin spoilers… vamos a ver qué puedo hacer… En el libro Festín de cuervos (publicación original: A Feast for Crows, 2005), la guerra en Poniente continúa, pero las hostilidades han decrecido debido a los diferentes cambios en el liderato de algunas facciones, que provocarán variaciones en fidelidades e intereses, y de los sucesos en El Muro por los ataques desde el norte. El mar comienza a ser un escenario de combates y cierta niña seguirá el deseo más profundo de su corazón, por lo que empezará un aprendizaje para conseguir lo que anhela. Cuarto libro de la serie Canción de hielo y fuego, pero simultáneo al quinto (siga leyendo para una explicación).

Mi opinión. Novela densa pero que en realidad lo es por sumar nuevos personajes (hay que cubrir las bajas…) y por desarrollar líneas de trama que, más allá de que sean interesantes o no, sí que aportan poco en general a las que habían marcado los volúmenes anteriores (que también se desarrollan, tranquilos), que solo ofrece eventos relacionados con una parte de los personajes que han sobrevivido a las anteriores novelas y aquellos con interés en los que no aparecen en este libro tendrán que buscar el siguiente volumen que es, en su mayor parte, simultáneo en el tiempo a los acontecimientos de éste, que abandona la intriga de corte medieval para entrar en el terreno del medieval fantástico sin ambages, aunque todavía no el más convencional, de ritmo lento y con altibajos para ofrecer, en palabras de un amigo y que comparto, lo que podríamos denominar como un “anticlímax” en la serie.

Destacado. Las sensaciones de culebrón fantástico cruel que se habían notado en volúmenes anteriores son ya hechos consumados.

Potenciales evocados. Más perro viejo que Brandon Sanderson, Patrick Rothfuss o Joe Abercrombie, hay que indicarlo siempre, aunque aparecen tics de Larry Collins y hasta de David Jacobs.