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viernes, 6 de diciembre de 2013

LA SEGUNDA VARIEDAD. Philip K. Dick

-Más muestras de los trabajos cortos de Dick y probablemente más cercanas a su esencia.-

Portada del libro La segunda variedad, de Philip K. Dick
Edición en español (1991)
Género. Relatos.

Lo que nos cuenta. El libro La segunda variedad (publicación original: Second Variety. Volume Two of the Collected Stories, 1987) ofrece veintisiete relatos del autor, escritos entre 1952 y 1953, todos publicados con anterioridad en diferentes revistas entre 1953 y 1954, y que tocan temas tan diferentes, entre otros, como viajes en el tiempo muy particulares desde diferentes puntos de partida y con diferentes desarrollos, la naturaleza humana y la falta de conciencia (o no) sobre la misma, relojes decorativos con mucha acritud, confusiones con los comportamientos alienígenas, los intentos de las máquinas para terminar con los humanos, invasiones y extinciones, momentos cercanos a la fábula de toda la vida aunque más siniestros, la difícil convivencia entre seres humanos y artificiales según evoluciona la sociedad y confusiones arqueológicas alienígenas.

Mi opinión. Segundo tomo de los cinco dedicados a la recopilación de trabajos breves de Philip K. Dick, plagado de ideas interesantísimas en toda su extensión, irregular en resultados, con alguna cosa excelente y otras que no lo son tanto aunque manteniendo cierto nivel acorde con la categoría del escritor y su importancia en la ciencia ficción, con algún sorprendente toque de humor negro que no es muy habitual en su producción, que refleja muy bien (pero desde la perspectiva de género) situaciones sociopolíticas de su tiempo y que, igual que el primer volumen de la recopilación de relatos del autor pero probablemente con más éxito, puede servir como introducción al complejo, oscuro y desasosegante mundo que nos suele ofrecer Philip K. Dick.

Destacado. Para mí, el relato que da nombre a la recopilación.

Potenciales Evocados. Muy variados y demasiados para tantos relatos, por lo que no entraremos en detalles, pero quédense con que aquí se puede ver, desde muchas ópticas, la obsesión del autor con qué es real y qué no lo es, qué es cierto y qué es interpretación, qué es recuerdo y qué es imaginación.