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jueves, 11 de febrero de 2021

EL ALMUERZO DESNUDO. William Burroughs

-Un trabajo creador de tendencias y derivas, no solo literarias.-

Portada del libro El almuerzo desnudo, de William S. Burroughs
Edición en español (2016)
Género. Novela.

Lo que nos cuenta. El libro El almuerzo desnudo (publicación original: The Naked Lunch, 1959) ofrece distintas escenas de la vida del narrador, un politoxicómano adicto que, como buen yonqui, siempre está pendiente de la próxima dosis de aquello que pueda consumir. Los diferentes momentos de su desordenada existencia nos llevarán a varios países y tiempos, incluso a lugares poco reales en lo político o geográfico, pero muy auténticos en lo identitario.

Mi opinión. Libro que en su tiempo generó todo tipo de rechazos entre el establishment por lo que cuenta y cómo lo cuenta, pero que hoy ya no escandaliza en absoluto y eso permite un acercamiento más fácil a sus bondades narrativas.

Si bien puede anestesiar al lector por su insistencia en la descripción de momentos sexuales, escatológicos y criminales, ofrece un catálogo notable de críticas (a su manera, una que encaja en el estilo muy bien) a la sociedad de su tiempo (y, en la mayoría de sus aspectos, a la del nuestro). Enrevesada más que compleja, pesada (en ocasiones) más que insistente, más rara que extraña y, pese a todo, una novela muy influyente.

Destacado. El impacto que debió tener cuando se publicó por primera vez y que ahora, por la evolución social y literaria del mundo, todavía se puede apreciar.

Potenciales Evocados. En el aspecto de la composición narrativa, Rayuela en versión yonqui y Beat en su enésimo ciclo de esteroides; en el aspecto literario, La máquina blanda sin (tantas) derivas fantásticas, cruzada con Una mirada a la oscuridad (más) surrealista; mucho más desordenada, críptica y enloquecida que la versión cinematográfica de Cronenberg.