-Dentro de los límites del desempeño de Koontz,
que son los que son, entre sus trabajos más resultones.-
Edición en español (1988) |
Género. Novela (con un punto de partida de ciencia ficción).
Lo que nos cuenta. El libro Víctimas (publicación
original: Watchers, 1987) nos presenta a Travis Cornell, un ex militar
de operaciones especiales que mientras pasea por unos bosques encuentra un
Golden Retriever extraviado. El perro muestra una inteligencia llamativa y
Travis decide hacerse cargo de él, lo que hace que el hombre se cruce en el
camino de un asesino que está matando científicos, de una mujer a la que
acosan, de un agente federal al mando de un grupo de búsqueda militar y de una
criatura mortífera que parece perseguir al perro allá donde vaya.
Mi opinión. Novela plagada de clichés relativos a la forma
de escribir de Koontz y a la propia narrativa de esta clase de libros en la
segunda mitad de los años ochenta del pasado siglo (incluso de la sociedad de
esos tiempos), plagado de rellenos en su trama, de personajes (humanos) de
cartón piedra y de acción de cara a la galería.
Pero también hay que decir que tiene dos
personajes (no humanos) que funcionan muy bien, uno por lo que termina por
mostrar dentro de su salvajismo homicida a pesar de que sea durante el acto
final y el otro por lo bien narrado que está, enganchando al lector (al menos a
este lector, tanto cuando leí el libro hace muchos años como cuando lo he releído
no hace mucho) por su carisma, cercanía y “achuchabilidad”.
Destacado. Dentro de que es Koontz, e insisto en que sus
capacidades literarias son las que son, lo entrañable que resulta el perro
Einstein y también el manejo de la criatura antagonista según se acerca el
final y las reflexiones que, si quiere el lector, podría proponer.
Potenciales Evocados. Los tintes de la
persecución de The Hidden (solo la persecución, no las derivas) en versión
animal, con un Baby Yoda canino y un… algo que no puedo decir porque quizá sea
el spoiler más gordo posible en este libro… en versión híbrido lleno de
dientes afilados, mala intención y más vida interior de la que parece; de las
pocas veces en la que una traducción "libre" mejora la original en
cuanto a lo que ofrece el libro.