Género. Narrativa fantástica (o no…).
Lo que nos cuenta. En Los servidores del crepúsculo (publicación original: The Servants of Twilight, 1984) conoceremos a Christine, madre soltera, y su hijo Joey, un
niño espabilado para sus seis años. Cuando una anciana se aproxima a ellos
manifestando peligrosas incoherencias y una sorprendente clarividencia,
comenzará una persecución para terminar con la vida del joven que, para la
Iglesia del Crepúsculo, es el Anticristo al que hay que matar para proteger a
la humanidad. Originalmente publicada con el seudónimo de Leigh Nichols.
Mi opinión. Novela de consumo, de buen ritmo, bastante
repetitiva y llena de clichés en sus devenires, con personajes construidos en
cartón piedra, llena de acción que, en realidad, sabemos que no es peligrosa
más que para los secundarios, que al final mejora porque ha generado dudas en
el lector y no sabe por dónde terminará el asunto y qué hará quién, muy fácil
de leer y poco más.
Destacado. Que para que lo “sobrenatural” no parezca
solo una excusa pobre, se debe jugar al despiste y a lo interpretable.
Potenciales Evocados. La profecía
desde el punto de vista de los abnegados luchadores contra el mal y patrocinado
por la NRA.