FLORES PARA ALGERNON. Daniel Keyes

-Novela agradable de leer, pero inferior en impacto al relato en que se basa.-

Edición en español (1986)

Género. Ciencia ficción.

Lo que nos cuenta. En el libro Flores para Algernon (publicación original: Flowers for Algernon, 1966) conocemos a Charlie Gordon, un hombre con la mente de un niño por sus discapacidades intelectuales quien, tras realizar unas pruebas, entra en un programa experimental desarrollado para conseguir mejoras espectaculares en el intelecto humano tras las exitosas pruebas preliminares en ratones, uno de los cuales, de nombre Algernon, recibirá el cariño de Charlie, quien irá viendo que los frutos que da el experimento le cambian la visión de sí mismo y de la situación en la que había vivido hasta entonces.

Edición en español (1974)

Mi opinión. Trabajo que “engorda” el relato (un trabajo muy bueno, entre los mejores que he tenido el placer de leer a lo largo del tiempo) del que viene para intentar hacer hincapié en los problemas que pasa a enfrentar el mejorado Charlie, y digo intenta porque lo poco gusta y lo mucho cansa así que, si bien extiende la situación y da nuevas perspectivas al asunto, puede resultar algo repetitivo (o al menos lo resultó para este lector) por mucho que trate de cambiar ópticas, causas y generadores, muy bien ajustado en lo técnico a la trama por el uso de los documentos escritos por el protagonista que nos cuentan (y nos dejan saber también, de manera indirecta) lo que está viviendo y cómo, llevándonos por un desarrollo implacable hasta un final potente y lleno de sentimientos, todo en una novela reflexiva y entretenida pero que, en mi opinión, no le hace justicia al relato original (un gran trabajo, recuerden).

Destacado. El relato en que se basó esta novela, escrito por Keyes en 1959, concentra mucho mejor (de forma excelente, diría yo) la potencia de su narrativa y contenidos. Si no se han leído el cuento, que se llama igual, los animo a que lo hagan.

Potenciales Evocados. Limitless sin glamur, menos positivista, más realista en muchos sentidos y sin concesiones a la galería, o Lucy desde lo cognitivo y no desde el Thriller de acción, pero además con situaciones muy sentidas, momentos en los que es facilísimo empatizar y … esperen, ¿en realidad no se parece tanto a Lucy, no?