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viernes, 15 de mayo de 2015

LA CRUZ DE HIERRO. Willi Heinrich

-Sobre los hechos imperan las personas que los protagonizan y sus actitudes.-
Portada del libro La cruz de hierro, de Willi Heinrich
Edición en español (2008)

Género. Novela (con una ambientación histórica clara, pero sin poder ser denominada novela histórica bajo ningún concepto).

Lo que nos cuenta. En el libro La cruz de hierro (publicación original: Das Geduldige Fleisch, 1955), en la Segunda guerra mundial y en el Ostfront, el sargento Steiner está al mando de un pelotón alemán al que se le asigna la misión de permanecer en las posiciones que ocupaba el regimiento mientras éste se retira a Krimskaia bajo la presión del avance soviético. Steiner hará lo necesario para cumplir su misión sin convertirse en pasto de las balas del enemigo, llegando al nuevo lugar de despliegue. Lo conoceremos a él, a sus hombres y a varios de los oficiales superiores, todos con personalidades y comportamientos muy diferentes, entre los que destacará el capitán Stransky por su animadversión hacia Steiner.

Mi opinión. Novela que, más que tratar sobre la Segunda guerra mundial en el Frente oriental, trata sobre hombres que pelearon en ella y sus diferentes formas de afrontarla en medio de las tónicas generales que imperaban en su entorno, que suele rehuir la narración de combates (por más que estén presentes en sus páginas) y a recurrir, en cambio, a la descripción de personajes mediante sus actos (mucho más que mediante sus palabras, al menos en la mayoría de los casos, pero hay que fijarse bien en el detalle), de ritmo sosegado, muy basada en los diálogos como herramienta para que el autor nos cuente lo que quería exponer, de relativa dureza, fría e interesante.

Destacado. La edición hubiese necesitado una revisión más profunda y férrea de la que supongo que fue objeto.

Potenciales Evocados. Puede que algo de Joseph Heller, pero ni Sven Hassel ni Curzio Malaparte ni Erwan Bergot ni Erich Maria Remarque, sino algo intermedio, aunque tal vez más cercano al último, pero mucho más descarnado, actual, práctico y realista; bastante distinta en muchísimas cosas a la famosa película de Peckinpah.