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jueves, 29 de enero de 2015

EL AMOR EN LOS TIEMPOS DEL CÓLERA. Gabriel García Márquez

Portada del libro El amor en los tiempos del cólera, de Gabriel García Márquez
Edición 1986
-Unos famosos 53 años, 7 meses y 11 días.-

Género. Novela.

Lo que nos cuenta. En el libro El amor en los tiempos del cólera (publicación original: 1985), en el Caribe colombiano y en algún momento del periodo de entreguerras, el doctor Juvenal Urbino es un anciano doctor casado con Fermina Daza y que contribuyó muchísimo a combatir el cólera en la región. Su muerte, al intentar recuperar la mascota de un antiguo amigo que se ha suicidado, es todo un golpe para familia, amigos y conciudadanos, pero también es un rayo de esperanza para una persona, Florentino Ariza, otro anciano de setenta y seis años que lleva algo más de medio siglo enamorado sin remisión de Fermina, desde que la vio al ir a entregar un telegrama al hogar de la familia Daza.

Mi opinión. Revisión del amor desde múltiples perspectivas, situaciones y puntos de vista sobre el marco de un costumbrismo poscolonial (exagerando, y además historia de Colombia al fondo) del que puede dar todavía más información leer entre líneas y pensar en lo apenas entrevisto, escrito con una pátina de nostalgia y otra más densa de romanticismo tan poco práctico como maravilloso e ideal, de pluma sobria y conseguidísima a la vez en sus tonos agridulces merced a un texto repleto de pequeños símiles de gran fuerza, de tiempos narrativos muy bien llevados dentro de la dificultad de los cambios de perspectiva y momento que, a la vez, sirven para jugar con el espectador y su proceso de formación de la imagen global, de ritmo muy pausado y, a su manera tan especial, una novela maravillosa.

Destacado. Lo diferente que resulta su lectura en diferentes momentos de la vida del lector (destacando que, en mi opinión, cierta experiencia y no madurez, tanto personal como sentimental, puede ser necesaria para poder disfrutarla con amplitud).

Potenciales Evocados. Cada lector los saca diferentes, porque en buena medida la novela despierta cosas dormidas. Saquen ustedes sus parecidos razonables, estimados lectores.