-Ese mamporrero, ese
microcirujano, ese obseso del tiempo como la dimensión más importante en su
oficio.-
Edición en español (2008) |
Género. Historia.
Lo que nos cuenta. El libro Las campañas
de Napoleón (publicación original: The Campaigns of Napoleon, 1966)
ofrece un análisis general, desde el punto de vista militar y en orden estrictamente
cronológico, de la concepción de la guerra y su puesta en práctica más
operativa que tenía el protagonista de la obra, desde Brienne a Waterloo.
Mi opinión. Curiosa aproximación a
Napoleón (una de las cientos de miles que se han hecho, pero todas diferentes,
al menos aquellas que yo he leído) desde la perspectiva más militar pero que
tiene la sutil virtud de navegar (que no sumergirse) en el mar revuelto de la
personalidad (hybris y daemon) del personaje, de su papel en los
enfrentamientos y paces de su época, incluso de la intervención de los
acontecimientos históricos fuera de su control en el desarrollo de su propia
leyenda.
Casi biografía militar
pero más exposición castrense (teórica y práctica) de las batallas y campañas
en las que participó Napoleón personalmente, que sin salirse del todo del
decorado de la perspectiva global de su tiempo, las Guerras revolucionarias francesas y las propias Guerras napoleónicas, se dedica más al dibujo de los
enfrentamientos. Desde la perspectiva ciclópea de la tarea, amena exposición, densa
pero didáctica, detallista pero informativa.
No sé si huye de dogmas o
simplemente trata de evitar el matiz valorativo de todo lo subjetivo, pero
consigue que sin contar nada nuevo nos encontremos con un perspicaz análisis
del pensamiento militar de Napoleón en función de los medios (y la capacidad de
mando y control sobre los mismos) con los que contó, pero también de su
formación, su experiencia, su propia personalidad e incluso de su talento.
Destacado. Análisis general de
virtudes y defectos, de éxitos y fracasos, porque todos nos ayudan a entender
su evolución (y su involución también) táctica y quizás hasta la personal.
Potenciales evocados. Cierta similitud con el
estilo de Adrian Goldsworthy; mucho que ver con Técnicas bélicas de la época napoleónica, pero con protagonista claro y mejor narrado; algún punto en
común con la idea de partida de Richard Holmes; nada que ver con Charles Esdaile, Max Gallo,
Simon Scarrow, André Castelot, entre otros, por si consigo situarle mejor de esta forma,
querido lector.